La ministra de Agricultura, María Emilia Undurraga, continúa recorriendo y constatando en terreno los daños que ocasionaron las intensas lluvias, vientos y caída de granizos entre las regiones de Valparaíso y Ñuble durante el fin de semana recién pasado.
Longaví, Villa Alegre y Pelarco en el Maule, y San Fernando y Nancagua en O’Higgins, fueron algunas de las localidades visitadas por la Secretaria de Estado, quien -previo paso por San Esteban y Santa María, en Valparaíso, y San Pedro de Melipilla en la Región Metropolitana, constató el daño en cultivos principalmente de frutas y hortalizas, cuyos daños se dejan ver en lo inmediato, pero que también -inevitablemente- se evidenciarán en el mediano y largo plazo.
“La verdad es que este frente ha sido muy poco uniforme en las regiones y es por eso que es tan importante estar aquí en terreno, para ver cuáles son las zonas afectadas, cuáles son los agricultores, cuáles son los rubros afectados. Este frente ha sido un golpe duro para muchos agricultores. Hemos estado acompañando agricultores pequeños, medianos en estos días, y ver cómo el esfuerzo de todo el año en un sólo día cae es muy fuerte para ellos, y nosotros como Gobierno queremos estar aquí para acompañarlos”, sostuvo la Ministra Undurraga.
Frutos de la temporada como sandía y melones, cultivos de zapallos y siembras de arroz corresponden a algunas afectaciones que han sido catastradas durante las últimas horas, por lo que la titular de Agricultura afirmó que “es inminente la declaración de la emergencia”.
El decreto de emergencia agrícola contempla principalmente la destinación de recursos para financiar algunos paliativos o soluciones acorde a las pérdidas que han sufrido los agricultores. La evaluación está en curso y debe ser de máxima rigurosidad.