Cartas al Director: Correr en Patagonia Running Fest y ser ganador absoluto siempre tendrá su encanto

3:50 AM suena el despertador, después de un día en que no paró el viento ni la lluvia, por fin el clima tuvó un poco de piedad. Nos levantamos junto a mi flaquita, que también correría los 50 kms., tomamos desayuno y nos dirigimos al bus que nos llevaría al punto de partida en el Parque Torres Del Paine, este bus salía a las 5:00 de Puerto Natales y la largada era a las 8:00, podía dormir un poco más en el trayecto, ya que en la noche se hizo difícil contemplar el sueño, el viento no cesó.

Llegamos a destino y listo, las cartas estaban tiradas, era hora de empezar a correr, por suerte en ese momento no había lluvia y casi nada de viento, pero como es sabido, el clima en la Patagonia cambia a cada instante y, efectivamente, el clima no dejó esperar.

Se venían 50 kms. por delante que en el papel, no se veía tan complicado, peeero no fue fácil, hace muchos años que compito en carreras de Trail Running, nunca he corrido una maratón de calle, y esto ha sido lo más cercano que he estado a ello. Correr por un camino de autos lleno de repechos es bastante agotador, pero si bien eso no era tan agradable, la real dificultad de la carrera sin duda alguna fue el viento, hubo largos momentos donde no se podía avanzar, el viento te tiraba hacia atrás, como será que en una ocasión el viento me sacó los lentes y volaron 200mts hacia atrás!!!, allá tuve que ir a buscarlos y de nuevo seguir tratando de avanzar, el clima fue muy agreste, a ratos lluvia, viento blanco y, por si fuera poco, se levantaba arena y te pegaba en la cara y en las piernas que eran las partes del cuerpo que iban más desprotegidas.

Siempre tuvé la esperanza que, en algún momento se despejaría y podría ver las maravillosas Torres del Paine o los Cuernos, pero no fue así. Sin embargo, pude apreciar el lago Nordenskjöld y el rio Paine que, por supuesto, tienen su colorido.

La carrera en total tuvo 1000 mts. de desnivel positivo, quizás poco para ser una carrera de Trail y mucho para ser una carrera de calle. Cuando quedaban aproximadamente 10 kilómetros, nos tocó una subida más pronunciada, donde ya las piernas estaban cansadas la lucha constante con el viento en verdad es muy agotadora, y por si fuera poco, pero bastante “entretenido”, los últimos 8 kilómetros fueron en una pampa dondé la clásica turba de la Patagonia te esperaba, dabas un par de pasos y te hundías. En el kilometro 45, cuando ya no queda nada, pasamos por un río, creo que, a esa altura era algo innecesario, hasta los pensamientos se me congelaron, no quería mojarme más! Pero, consciente que así son este tipo de carreras y te puedes encontrar con cualquiera de estos imprevistos en la ruta, te gusten o no, es lo que hace de este tipo de carreras una experiencia única, tienes que vivirlo para entender lo fascinante que puede llegar a hacer.

Parte de mi experiencia en estos simpáticos 50 kilómetros, donde el rol de la naturaleza jugó un papel preponderante en el desempeño que tuve, 4 horas 21 minutos fue lo que demoré en cruzar el pórtico de meta llegando en primera posición, muy feliz por ello, tomando en consideración en que era una competencia donde habían muchos corredores extranjeros que venían a medirse a la Patagonia, pero como competidor nunca satisfecho. En fin a seguir aprendiendo, seguir desafiándome y por supuesto, seguir conociendo lugares de nuestro largo, estrecho y hermoso país. 

En resumen feliz de llegar a la meta después de una movida carrera, que te esperen con un abrazo, con un rica Austral Calafate, una ducha calientita y poder disfrutar de un post carrera con tus compañeros unas ricas pastas, unas exquisitas hamburguesas y en un rico ambiente, no puedo dejar de agradecer a todo el equipo Mountain Running Co que estuvo  pendiente de la aventura de su entrenador, también a los amigos del Club Atlético Melipilla que gracias a su compañerismo y buena onda esto se hace mucho más fácil. Por otro lado mención especial al gimnasio ActivGym de la comuna, lugar donde me facilitan sus inmediaciones para que pueda entrenar con los mejores implementos deportivos y asesorarme con excelentes profesionales. Quizás esto podría ser mejor si se contara con el apoyo de la Municipalidad de Melipilla, esperemos que para otra oportunidad esto pueda ser posible, por ahora a seguir creciendo en este lindo deporte.

Por Eduardo Andrés Cordero Guaman, melipillano ganador absoluto del Patagonia Running Fest.

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