Melipilla, 21 diciembre 2020
Señores
Portal de Melipilla y linea.directa@mercurio.cl
Presente:
- Mi nombre es Arturo Calvo Gáez, Rut es 6871753-1.
- Mi celular y Whatsapp es 994387230.
Junto con saludarles, deseo pedir vuestra ayuda para detener una tremenda injusticia.
Soy tesorero del Centro General de Padres y Apoderados del Colegio Jaime Larraín Bunster, cuyo sostenedor es la Corporación Municipal de Melipilla.
Años atrás, este colegio estaba a punto de ser cerrado, debido a su alto nivel de violencia, bajo nivel de enseñanza, y un largo etcétera. Su Director, don Miguel Alonso, pidió al entonces entrante Alcalde, Mario Gebauer, la posibilidad de elegir a su equipo docente y no la Corporación Municipal de Melipilla (Cormumel), como era habitual. De hecho, “tiraban” a esta escuela, todos los profesores que tenían problemas, o aquellos que estaban a punto de jubilarse.
También era el colegio donde iban a parar todos los alumnos conflictivos que habían echado de otros establecimientos. El compromiso del Director fue levantar el colegio a los primeros lugares de la comuna, en un lapso de cuatro años.
Fue aceptada su solicitud, armó su equipo de docentes, y al cabo de un año, el Colegio Jaime Larraín Bunster, pasó del último lugar, al primero. Todo esto basado en el comprosimo de padres y apoderados de comprometerse con el Proyecto de Educación del Colegio.
Subieron las notas, el bullying desapareció, y tuvo ese primer año, el mejor ranking de la prueba Simce. Esto no se detuvo ahí. Año tras año, se destacó en todos los ámbitos, hasta ponerse por encima de los colegios particulares pagados y de élite en Melipilla.
Ha sido la única escuela a la cual la Agencia de Calidad de la Educación, no tuvo que darle consejos u orientación respecto a la convivencia interna. Fuimos premiados a nivel comunal, regional, y nacional, como la mejor escuela municipal de Chile.
Reportajes al Colegio fueron muchos. El Mercurio, TVN, Mega, entre otros que recuerdo.
Sin embargo, desde que asumió el actual Alcalde, Iván Campos, ha sido una persecución implacable. Se le ha tratado de acusar de muchos cargos, todos comprobados como falsos.
Desde hace más de un mes, se inició otra investigación en su contra, bajo el cargo de “discriminación”. Quien conozca a nuestro Director, sabe que la acusación no tiene patas y cabeza.
Supimos, como Directiva, recién hace un par de semanas a través del Consejo Escolar, donde estuvo Patricio Díaz, Jefe de Educación de Cormumel. Él nos dió a conocer del cargo del cual está siendo investigado don Miguel.
Le expresamos nuestra molestia y preocupación por las constantes acusaciones, siempre en la misma época del año. En reunión con el Gerente de Cormumel, César Araos, éste se negó a confirmar o desmentir el cargo informado por Patricio Díaz. Quedamos con más sospechas que toda la investigación es una caza de brujas.
Todo el mundo sabe que en las investigaciones sumarias hay interrogatorios buscando pruebas para inculpar o exculpar al acusado. Pero lo que está haciendo el equipo jurídico de Cormumel, con Jorge Angulo a la cabeza, es torturar psicológicamente a todos quienes atestiguan a favor del Director mientras que, para aquellos que han participado en este complot, hay cafecito y galletitas.
La Cormumel está torturando, amenazando y, tal vez, cambiando las declaraciones de aquellos que apoyan a nuestro Director. No es el único Director al cual la Cormumel a perseguido. Hay muchas presiones indebidas hacia los Directores y Directoras de nuestros Colegios Municipales.
Esto es el funesto resultado de “tercerizar” la Educación en Chile. Al traspasar la Educación a Municipios y particulares subvencionados, éstos se convirtieron en CONTRATISTAS DE LA EDUCACIÓN. Señores, don Miguel Alonso, es uno de los últimos profesores normalistas en Chile. Su única religión, su único partido político ES LA EDUCACIÓN.
Favor su ayuda para detener esta aberración en contra de nuestro Director.
Muchas gracias.
Atte.,
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