Con más de 33 años de servicio en la Institución y tras haberse desempeñado en el Regimiento de Ingenieros Nº 7 “Aconcagua”, Regimiento de Ingenieros Nº 8 “Chiloé”, Subjefatura Zonal del Cuerpo Militar del Trabajo “Puerto Montt” y Regimiento de Ingenieros de Montaña “Puente Alto”, hoy presta servicios como asesor del Comandante de la División de Ingenieros.
Su extenso currículum incluye labores como operador de maquinaria pesada, jefe de faena y apoyo a la sección de Maquinaria Pesada del Cuerpo Militar del Trabajo, control del cargo de Ingenieros a nivel Institucional, ampliación de la pista de aterrizaje del archipiélago Juan Fernández, organización, instalación y entrenamiento de la Compañía de Ingenieros del Ejército en Haití, Asesor Técnico para la recuperación y renovación del equipamiento de Ingenieros y asesor de la Jefatura de Estado Mayor de la División de Ingenieros, entre otras funciones.
Con esa perspectiva profesional, el Suboficial Mayor Gatica puntualiza que ha sido testigo del desarrollo del Arma de Ingenieros tanto en lo material como en lo técnico, lo que ha permitido avances sustantivos en las capacidades disuasivas del Arma a nivel nacional, la experiencia internacional en operaciones de paz y desminado humanitario, así como, la construcción de caminos, y por lo tanto, en la integración del territorio nacional. Lo anterior implica que “más familias dejaron el aislamiento en el extremo austral. Es muy reconfortante ver como esas personas hoy disponen de transporte expedito, luz eléctrica y pueden abastecerse y reunirse con sus seres queridos”.
Finalmente, y en cuanto a las nuevas generaciones, señala que la educación en las escuelas matrices sienta una buena base, pero que sin embargo, esta debe ser una actividad de desarrollo permanente, porque el desafío del Ejército de hoy es, multiplicar y diversificar sus capacidades, para ir afrontando el futuro de la mejor manera.
“Siempre será necesario darle un valor agregado al trabajo, un sello personal que nos identifique, nos haga sentir realizados y motive a los demás. Hay que hacer las cosas bien más que por cumplir o por los aplausos, por un tema de satisfacción personal. A mi hijo Gustavo siempre le recalco que hacer lo correcto no siempre es lo más fácil, pero todo es más fácil cuando haces lo correcto”, concluye.