A más de un mes del estallido social, las consecuencias económicas han sido desvatadoras para todos los chilenos y , especialmente, las pymes. Un ejemplo de ello, es la Empresa de Transportes MELIBUS, la cual durante estos últimos 30 días se ha visto gravemente afectada por la suspensión de salidas durante los desmanes registrados en la ciudad, como también, por la cero fiscalización sobre el horario de carga y descarga de camiones en Ortúzar; la falta de semáforos y señalética en calles del sector poniente; y el uso indiscriminado de los paraderos de Plaza de Armas, Melipilla.
Así lo indicó en exclusiva para el Portal de Melipilla el propietario y Gerente General de MELIBUS, José Peralta Rojas, quien señaló que actualmente en su empresa familiar trabajan 32 personas (choferes, administrativos, inspectores y nocheros), quienes recorren la variante 3-A que va de Tres Poniente a Huilco ida y regreso, como también, Melipilla-Pomaire y viceversa. Sin embargo, tanto a ellos como al resto de los chilenos, los desmanes registrados en la ciudad les han impedido salir normalmente por el resguardo del equipo humano e infraestructura.
Agregó que sumada a esta grave situación existe cero fiscalización en el cumplimiento de la Ordenanza Municipal de Carga y Descarga en la vía pública, que fue modificada en octubre de 2017, la cual establece horarios exclusivos (lunes a sábado de 08.00 a 10.00 horas) para hacer estas operaciones en Barros, Serrano, Ortúzar y Silva Chávez, como también, se refiere a la obligatoriedad de no estacionar en estas mismas calles de lunes a sábado, desde las 08.00 y hasta las 20.00 horas, exceptuando domingos y festivos.
Finalmente, el Gerente General de MELIBUS explicó que otro problema que ha empeorado aún más el trabajo de los conductores es la nula reposición de la señalética destruida durante las manifestaciones, como es el caso de los semáforos de Merced con Ortúzar y Merced con Silva Chávez, entre otras.
Adjuntamos decreto:
