¿Deben las luces de Navidad ponerse este año por la crisis energética?

Muchas grandes ciudades empiezan a ultimar los preparativos para encender las ya tradicionales luces de navidad por muchas de sus calles. Los ciudadanos ven estas luces como un símbolo inequívoco del comienzo del invierno. Aún así, este año las luces navideñas pueden causar muchas discusiones entre políticos, ecologistas, ciudadanos e incluso países enteros. Esto se debe a la crisis energética que sufre Europa actualmente y que afecta a todo el mundo causada por la invasión rusa de Ucrania.

Los ecologistas tienen una opinión muy tajante al respecto: Ellos abogan por quitar todas las luces de navidad. Un integrante de Ecologistas en Acción afirma que las luces de navidad supondrán un pico de producción de energía eléctrica. Explica que este pico se produciría en los meses de invierno, donde la energía solar es más escasa y provocaría una dependencia mayor del gas para cubrir la demanda. Detalla que su retirada de las calles permitiría ahorrar considerablemente en el  precio de la luz  durante los meses de invierno.

Medidas para ahorrar luz en las capitales con las luces de navidad

Para ahorrar en el consumo de luz estos próximos meses y no ahogar a los ciudadanos con los precios impuestos por las compañías de luz, varias ciudades han propuesto multitud de ideas. La más popular, y que va ganando fuerza con el tiempo, es la propuesta de reducir las horas del alumbrado navideño. Esta medida se basaría en reducir las horas de consumo eléctrico diario en una hora, sin perder del todo la esencia de la navidad.

Otra opción muy estudiada es la sustitución de todas las luces de navidad actuales por luces LED. Se sabe que las bombillas LED son más duraderas, eficientes y ahorran más energía que las bombillas convencionales. Por esa misma razón los ayuntamientos piensan en introducirlas en su alumbrado navideño. Sería una medida intermedia, donde conseguirían ahorrar en consumo, pero seguirán sin contentar a los sectores ecologistas. El principal problema de esta medida radica en su precio: Las bombillas LED son considerablemente más caras que las bombillas de siempre y eso provoca una gran reticencia a las entidades para realizar grandes modificaciones en sus luces de navidad.

También se ha propuesto el retraso de la puesta en marcha de las luces de navidad. Este retraso no parece que vaya a ser el enfoque principal, ya que en muchas capitales ya se empiezan a observar a los funcionarios trabajando en su implementación.

España se pronuncia sobre las luces navideñas

En España tenemos ejemplos de varias capitales de provincia que ya se han pronunciado al respecto. Todas tienen una opinión en común: Todas han mantenido o aumentado su inversión en las luces de navidad para este 2022. Sectores como el comercio o la hostelería rechazan cualquier medida relacionada con apagar antes sus luces este invierno. Insisten en que el ahorro por esta medida sería muy poco significativo y apuestan por mantener el alumbrado para así incentivar la compra dentro de sus establecimientos.

En ciudades como Vigo, explican que la retirada del alumbrado navideño significaría una aceptación de la victoria de Putin. Otras ciudades como Madrid y Barcelona ya hablan con los principales sectores implicados. El discurso que siguen la gran mayoría de ciudades para explicar este gasto en las luces de navidad es muy parecido. Dicen que más que un gasto se trata de una inversión, ya que las luces atraen a más clientes a comprar en todos los comercios y así salvar un sector que lo ha pasado muy mal desde el comienzo de la pandemia.

Europa se resiste a prescindir de la Navidad por culpa de Putin

En Europa la situación es más crítica: los países bálticos y centroeuropeos se están viendo más afectados por la crisis energética. Por eso están reflexionando sobre si implementar o no medidas más estrictas. En países como Alemania o Suiza, los grupos ecologistas exigen una retirada total de las luces navideñas. Explican que esta propuesta se lleva sugiriendo durante años a causa del cambio climático y que ahora es más vital que nunca aplicarla.

En Austria por ejemplo hay opiniones bastante dispares sobre el tema: los comerciantes también abogan por mantener la iluminación y así “luchar” contra Putin y dar ánimos a la gente ante este difícil invierno. Pero el gobierno austriaco sigue la línea de sus países vecinos y apuesta por una reducción de las horas diarias de uso y de la cantidad de decoración navideña.

El miedo a un gran apagón este invierno es real

En algunos países se empiezan a ver actos de pánico por el miedo a un apagón global este invierno en Europa. En países como Reino Unido, Francia o Alemania se han empezado a proponer medidas para combatir un desabastecimiento de energía. Estas medidas se basan en sugerir a la población que compren mantas, velas o linternas para un caso de emergencia. Esta histeria también ha hecho que la demanda de madera y ropa invernal haya aumentado notablemente.

Comentarios
Compartir